Un pequeño discurso

Esto es más o menos lo que quería decir en la pasada reunión del grupo Se buscan periodistas, convocada a través de las redes sociales y a la que asistieron más de 130 personas preocupadas por la situación laboral y profesional del sector. 

Que lo lea al que le apetezca.

Hemos llegado hasta aquí precisamente para dejar atrás debates estériles y discusiones que sólo llevan a una vía muerta, para dejar atrás los lastres del pasado y encarar el futuro de la profesión periodística. Un futuro que es tan difícil y desconocido como abierto y esperanzador. Un futuro que hemos de labrar nosotros mismos.

Pero, ojo, es un futuro que, como todos los futuros, tiene un apellido: juventud.

Me gustaría que me dejarais recordaros ese sector del periodismo que conforman los estudiantes que asisten a esta facultad y los que acaban de salir a un mercado laboral y una situación profesional que todos tememos, que muchos repudiamos pero que todos queremos atacar.

Estos jóvenes son el combustible que necesita un movimiento como el de Se buscan periodistas. Son los que pueden atreverse con todo y los que no están atados a nada. Son los primeros que pueden acabar con esos viejos vicios que han conducido al periodismo a la imagen que tiene hoy día, los que mejor conocen las tecnologías necesarias para revolucionarlo y los que más energía, ilusión e ideas pueden aportar.

Hay dos máximas: basta de lamentos y empecemos a caminar. Qué mejor ejemplo para acabar con los lamentos que estos jóvenes,  que aún no se han quejado pero tienen mucho que decir o los que, una vez lanzados al mundo que hay fuera de estas paredes, no pierden las ganas, ni la esperanza ni los sueños.

Porque eligieron el periodismo por vocación, por admiración hacia un trabajo para valientes, para personas dedicadas a una profesión imprescindible y más necesaria que nunca, que es informar. El periodismo nunca morirá si nos encargamos de alimentarlo con savia nueva.

En cuanto al empecemos a caminar, ya se lo dije el otro día a unos compañeros de mi quinta: El movimiento se demuestra andando y a los que pensamos dedicarnos a la comunicación ya nos conviene empezar a andar.

Estas iniciativas que están surgiendo en la red, estas expectativas generadas por más de 3.000 periodistas de toda Andalucía en el caso de Se buscan periodistas, debemos tomarla como el primer paso que necesitamos. Que sirva para canalizar todos esos proyectos que bullen en nosotros. Y también para darle la continuidad y el apoyo que las grandes ideas requieren.

Tenemos todo lo necesario: productos diferenciados del resto, proyectos innovadores, energía, tiempo y ganas, tecnologías asequibles y al alcance de la mano. Pero también gente clamando por demostrar su esfuerzo, profesionales en activo y de currículo infinito, emprendedores interesados en la comunicación, bloggers, fotógrados, empresarios, redactores, técnicos… en suma, tenemos conocimientos y herramientas, experiencia y juventud.

De todo esto no puede surgir sino la piedra de toque que llevamos esperando desde hace mucho. Ahora toca acudir a la llamada y responder.